Odontopediatría de la UNAB atiende a cerca de 200 pacientes en situación de discapacidad al año
Con una mirada de inclusión y justicia, la Facultad de Odontología de la U. Andrés Bello, especialmente alumnos y docentes de la especialidad de Odontopediatría, atienden a niños de instituciones como Teletón, Junaeb y Fundación Luz.
Las sonrisas abundan en la Clínica Odontológica de la Facultad de Odontología de la Universidad Andrés Bello. ¿La razón? El entusiasmo y compromiso para atender a niños en situación de discapacidad.
Efectivamente, hace cuatro años que la Facultad de Odontología de la UNAB se propuso una serie de objetivos en esta materia que se plasmó en convenios con instituciones como Teletón, Junaeb, Fundación Luz -específicamente con el Colegio Santa Lucía de niños con discapacidad visual-, para aumentar el acceso a atención odontológica y realizar acciones de prevención y promoción en la salud bucal de las personas en situación de discapacidad.
rel=»attachment wp-att-226822″>“Para satisfacer la atención odontológica de estos pacientes, se propuso una estrategia de intervención innovadora en el proceso de atención dental tradicional, vinculando el programa de estudios de especialización odontológica de una universidad chilena, con las necesidades imperantes de la realidad nacional”, explica la Dra. Georgina Toro, Directora Especialidad Odontopediatría de la Facultad de Odontología de la U. Andrés Bello.
“Los objetivos planteados por la especialidad de Odontopediatría fueron encaminados a realizar una atención odontológica de calidad, que permitiera crear vínculos con el medio de manera de estrechar lazos con instituciones nobles que desarrollan una actividad que va dirigida a los pacientes con necesidades especiales”, agrega la Dra. Toro.
La autoridad destaca el compromiso de la Facultad. “Estos pacientes tienen dificultad en la atención en otros centros de salud, ya que se requiere adecuar la modalidad de trabajo a sus necesidades específicas, en la que se necesita una atención no convencional, por ejemplo, atención en pabellón bajo sedación o anestesia general”, dice la académica de la UNAB.
“La tendencia actual, siguiendo ‘el modelo social de la discapacidad’, es la utilización del término ‘Cuidados Especiales en Odontología’, el que representa una especial responsabilidad de los profesionales que atienden a este grupo de pacientes quienes no serán considerados como deficitarios en sus capacidades, sino que presentan capacidades y necesidades diferentes, que deberán ser satisfechas por atención profesional adecuada”, detalla la Dra. Toro.
Para ello, la Facultad de Odontología de la UNAB cuenta con la infraestructura necesaria que incluye, además, la elaboración e implementación de material educativo con características especiales para pacientes con discapacidad visual, autistas, con Síndrome de Down, etc. “En la Facultad, se han incorporado elementos para facilitar el acercamiento a los niños. Por ejemplo, existe un cepillero que fue adecuado a los requerimientos del programa. Además, se cuenta con un equipo de profesionales competentes, con herramientas de adaptación conductual y comunicacionales en las distintas especialidades odontológicas y anestesiólogos, para apoyar los procedimientos que ellos requieren”, comenta la experta, quien destaca que al año se atiende cerca de 200 pacientes en situación de discapacidad.
Información para educar
Respecto al tipo de procedimientos que se realizan con más frecuencia en la atención de salud dental para niños, la Dra. Georgina Toro explica que “en la catedra de Odontopediatría se entrega una atención muy personalizada, integral, y de gran dedicación. Cuando tratamos a pacientes con necesidades especiales, tratamos de involucrar mucho a sus padres o cuidadores, ya que muchos de ellos son de alto riesgo social”, dice.
“Tanto a nuestros pacientes con necesidades especiales, como a sus padres o tutores, les entregamos información para educar en muchos aspectos, desde conocimientos de una dieta saludable, hábitos de higiene oral, cuidados en general, junto a la atención rehabilitadora más adecuada de acuerdo a las necesidades específica de cada uno de ellos”, agrega la cirujano dentista.
“Para el equipo que me corresponde dirigir, es una gran satisfacción participar en la atención de estos pacientes. Para ello, entregamos lo mejor de nosotros tanto en lo técnico, profesional como en lo humano y, junto a la rehabilitación de nuestros pequeños pacientes, crecemos también nosotros como personas”, concluye la Dra. Toro.
Dentista y académica UNAB relata su experiencia
rel=»attachment wp-att-226820″>Carolina Winter Kraljevic se tituló como cirujano dentista hace cuatro años. Hoy, está realizando el postgrado de Odontopediatría y, actualmente, es académica de la Facultad de Odontología de la U. Andrés Bello.
“Quiero ser un aporte de manera activa con la sociedad. Tenemos una gran deuda con los niños en materia de educación y salud”, subraya la Dra. Winter, de 30 años.
“Una de los principales razones que me motivó a estudiar Odontopediatría, es el gran equipo humano que se ha conformado y afiatado en estos años, donde los docentes demuestran un gran compromiso y experiencia para atender a todo tipo de pacientes que requieran una atención oportuna, eficaz y de calidad. En este ámbito, la Facultad de Odontología se ha caracterizado siempre por demostrar un gran compromiso con pacientes niños y adultos con necesidades especiales”, dice la cirujano dentista.
“Como en toda acción odontológica, se requieren de cualidades y habilidades que lamentablemente no todos han podido desarrollar por diversos factores. Es por esto, que muchos pacientes con necesidades especiales no reciben los tratamientos necesarios para poder tener una óptima salud oral, generándose un círculo vicioso basado en el avance de las distintas patologías, como caries y enfermedad periodontal (gingivitis y periodontitis), entre otras”, subraya.
“Cuando decidí estudiar esta especialidad, siempre supe que sería un gran desafío, no solo por los conocimientos entregados, sino también por los rasgos propios de mi personalidad, ya que en cierta medida me involucro mucho con los pacientes y sabía que en ocasiones no iba a tener los resultados esperados. Aun así, dejé los miedos y prejuicios de lado, ya que, tanto en materia de educación como salud, los niños merecen ambos tópicos de la manera más integral y completa posible”, agrega la profesional.
Dentro del amplio número de pacientes que presentan necesidades especiales, a la Dra. Winter le ha tocado atender niños que presentan Autismo y Síndrome de Asperguer. “Estos niños, presentan un comportamiento muy riguroso, son personas muy inteligentes y críticas, y preguntan todo lo que uno les va hacer. Siempre hay que actuar con la verdad y demostrarles lo que estás haciendo. Si actúas de forma correcta, te ganas su confianza y eres capaz de realizar casi cualquier acción odontológica. También he atendido niños con Síndrome de Down, los cuales han sido muy cariñosos. He tenido muy buenas experiencias atendiéndolos, y más de alguna sonrisa y lágrima de alegría me han sacado”.
Escrito por: Sonia Tamayo