Médicos de la UNAB realizaron con éxito rotación clínica en la University of Chicago
Cinco egresados de la Facultad de Medicina de la U. Andrés Bello formaron parte del programa de pasantía en los hospitales de esta prestigiosa universidad estadounidense. Andrés Villaseca, Pamela Salinas, Luis Contreras, Ingrid Plass y Elianet Fonseca relatan su vivencia: se levantaban a las 4.30 AM, participando en procedimientos quirúrgicos y de trabajo hospitalario, y […]
Cinco egresados de la Facultad de Medicina de la U. Andrés Bello formaron parte del programa de pasantía en los hospitales de esta prestigiosa universidad estadounidense. Andrés Villaseca, Pamela Salinas, Luis Contreras, Ingrid Plass y Elianet Fonseca relatan su vivencia: se levantaban a las 4.30 AM, participando en procedimientos quirúrgicos y de trabajo hospitalario, y tuvieron que sobrellevar en la lejanía el impacto del terremoto. Acá sus historias.
La Facultad de Medicina de la U. Andrés Bello es pionera en Chile al firmar un nexo formal con la Facultad de Medicina de la Universidad de Chicago, el cual implica una rotación clínica electiva de alumnos de esa casa estudios por un mes, en el último año de su carrera.
Los cinco egresados que viajaron por todo marzo –según relata el Coordinador del convenio doctor Eduardo Costa- se encontraron con un ambiente muy grato, un lugar ideal para el estudio, tuvieron a su disposición los mejores profesores, instructores, un muy alto nivel de estudiantes, inmejorables clínicas, laboratorios, simuladores, bibliotecas, conferencias, reuniones clínicas, etc.
Así lo confirma Andrés Villaseca, 26 años y que realizó la especialidad de Traumatología-Ortopedia: “Fue más de lo que esperaba. Compartí con residentes y becados, no existía diferencias. Ayudé a operar, a evaluar pacientes, tuve un trabajo activo. Más que un tema curricular, siento que esta experiencia me permitió darme cuenta que en Chile la práctica de salud es similar, sólo que en Estados Unidos se cuenta con más recursos y una mejor organización”.
Villaseca comentó que su rutina diaria comenzaba a las 5.45 AM con la visita de los pacientes operados el día anterior. “Continuaba con reuniones, luego cirugía y en la tarde atención en el policlínico”, comentó.
Sin duda que uno de los momentos más difíciles para los cinco médicos de la UNAB fue enterarse del terremoto del 27 de febrero a miles de kilómetros de distancia. “Nos llamó el doctor Costa que vivía en la torre ubicada al frente de la nuestra y nos dice que hubo un terremoto en Chile, pensamos que era un temblor fuerte, pero después nos confirmó que era una catástrofe. Tratamos de llamar a nuestras familias pero fue imposible, recién en el día pudimos contactarnos por Facebook y enterarnos que estaban bien. Por las noticias supimos de la magnitud del sismo”, explicó.
Para Pamela Salinas, 27 años, esta experiencia también fue inolvidable: “nos dieron un trato respetuoso y fue a la par con los becados y residentes. Mi labor fue en Pediatría y enfermedades infecciosas y me llamó la atención trabajar con antibióticos de última generación. Mi jornada comenzaba a las 8 AM examinando pacientes y luego participando en una serie de conferencias”, dijo.
Luis Contreras, 24 años, hizo su pasantía en la especialidad de Neurocirugía. “Conocimos un centro de alta complejidad y de referencia en Estados Unidos, fue una gran oportunidad que nos ofreció la UNAB. Tuve una relación fluida con doctores y becados. Este departamento cuenta con equipos en vascular, tumores, columna y pediatría y vienen personas de todo el país y del mundo a atenderse. Para mí la jornada comenzaba a las 5.30 horas y se prolongaba por doce horas”, relató.
Ingrid Plass, 24 años, realizó su especialidad en el Servicio Cirugía, desempeñándose en cirugía colorrectal e infantil. “Tenía que llegar al hospital a las 5 de la mañana, por lo cual tenía que levantarme a las 4. Fue una experiencia que me permitió conocer otra tecnología, otro enfoque de la medicina”, subrayó.
Finalmente, para Elianet Fonseca, 26 años, realizar la pasantía en la especialidad de Dermatología significó una experiencia inolvidable. “Dermatología es uno de los departamentos más antiguos de Medicina en la Universidad. Cuenta con diez dermatólogos distribuidos en atención de adultos, infantil y quirúrgicos, además de nueve residentes. La organización es tal que tres semanas antes de llegar ya me habían enviado mi horario con las actividades que debía realizar. En la pasantía éramos dos alumnos de la U. de Chicago y yo, quienes siempre estábamos bajo la supervisión de un doctor”, concluye.
University of Chicago cuenta con ocho hospitales, 700 médicos, 620 becados, atienden a 26 mil pacientes al año y fue la primera entidad en realizar un transplante de hígado con donante vivo.
Escrito por: Prensa-UNAB