Culmina Curso de Arqueología Subacuática en Cimarq-Quintay
El entrenamiento práctico realizado en la dependencias del Centro de Investigación Marina Quintay de la Universidad Andrés Bello, terminó con la organización y los participantes muy satisfechos por la experiencia.
El entrenamiento práctico realizado en la dependencias del Centro de Investigación Marina Quintay de la Universidad Andrés Bello, terminó con la organización y los participantes muy satisfechos por la experiencia.
Luego del entrenamiento práctico para un grupo de doce estudiantes seleccionados, formado por arqueólogos nacionales, extranjeros y representantes de la Armada de Chile, finalizó exitosamente el segundo curso de arqueología subacuática, organizado en conjunto con el Consejo de Monumentos Nacionales (CMN), ARKA Consultores, Instituto Italo Latinoamericano (IILA), Embajada de Italia, Armada de Chile, Universidad de Chile y Universidad Andrés Bello.
El entrenamiento práctico fue conducido por los profesores Mocheggiani Carpano, Director de la Sección Técnica para la Arqueología Subacuática (STAS) del Ministerio para los Bienes y las Actividades Culturales de Italia; y Constantino Meucci, conservador, experto internacional de la UNESCO, quien se manifestó muy conforme con el desempeño de los alumnos, quienes los primeros días partieron un poco inseguros, pero gradualmente lograron realizar todas las técnicas subacuaticas demostrando un nivel profesional elevado.
Cimarq-Quintay de la Universidad Andrés Bello y ARKA Consultores estuvieron a cargo del aporte de instalaciones, soporte técnico, logístico y seguridad para la realización de las actividades de entrenamiento práctico en las costas de Valparaíso y Quintay.
Las actividades submarinas fueron realizadas desde la central de operaciones de ARKA, ubicada en el Muelle Barón, desde el cual se embarcaba y navegaba durante diez minutos, hasta llegar a las cercanías de la playa San Mateo, donde descansa un pequeño naufragio a 14 metros de profundidad, en un fondo de arena y oscuras aguas que le dan un aspecto arcano e intrigante. En este lugar se encuentran pequeños fragmentos de cerámica, vidrio y madera, que luego de ser registrados fueron rescatados aplicando metodologías especificas para este fin, y llevados a Cimarq-Quintay donde los estudiantes los sometieron a un completo proceso de limpieza y conservación.
“Cimarq-Quintay ha sido un lugar muy cómodo y equipado para realizar los trabajos de taller de restauración, disciplina esencial que integra este curso, ya que no podemos pensar sólo en realizar los estudios subacuáticos sin incluir en la conservación de los materiales; un proyecto integral y serio debe proyectar hasta la musealización, no sacamos nada con invertir grandes recursos en los estudios y extraer los restos, si después estos quedan almacenados en una bodega o deteriorándose a la intemperie”, enfatizó Constantino Meucci.
Hugo Silva, buzo de salvataje de la Armada reconoció la experiencia como innovadora, “nos sacó de nuestro trabajo habitual, sumergiéndonos en el mundo de la arqueología, permitiéndonos conocer y compartir con la civilidad nuestro trabajo y disciplina militar”. Por su parte Joaquín Vega, egresado de Arqueología, manifestó “haber aprendido mucho acerca de la conservación de diversos materiales en el medio subacuático y podremos en el futuro aplicar estas técnicas al momento de vernos enfrentados a un sitio arqueológico sumergido”.
El programa de Desarrollo y Perfeccionamiento de Actividades Subacuáticas de Cimarq-Quintay, espera seguir apoyando este tipo de iniciativas, realizando nuevas versiones de este curso junto al Consejo de Monumentos Nacionales, dando las oportunidades de capacitación a más investigadores y científicos para interiorizarse en el delicado tema del patrimonio cultural subacuático, y sensibilizando acerca de la labor del arqueólogo frente a estos recursos culturales no-renovables, únicos y valiosos.
Escrito por: Prensa-UNAB