Mi hijo molesta a sus compañeros: la otra cara del bullying
Nuestra Egresada de Psicología, Varinia Signorelli, es columnista de la sección «MUJER» del periódico Publimetro. En esta columna profundiza en el bullying escolar desde un punto de vista pocas veces tratado.
Nuestra Egresada de Psicología, Varinia Signorelli, es columnista de la sección «MUJER» del periódico Publimetro. En esta columna profundiza en el bullying escolar desde un punto de vista pocas veces tratado.
Mucha información tenemos acerca del bullying, continúan apareciendo casos y los establecimientos educacionales están obligados, por ley, a tomar cartas en el asunto en la prevención de éste. Mucho se ha avanzado, y ya todos nos mantenemos alerta.
Como padres y madres tenemos interiorizado que es sumamente importante estar en un contexto escolar favorable, en donde los niños se sientan bien y acogidos, ya que si esto no sucede se merma su autoestima, y no solo ésta, sino también las posibilidades de desplegar habilidades cognitivas y, finalmente, de aprender.
Es por esta razón que ponemos énfasis en preguntar a nuestros hijos acerca de cómo se sienten y de las relaciones interpersonales que va teniendo en el colegio. ¿Cómo lo pasaste?¿Con quién jugaste?¿Tienes amigos?, son algunas de las preguntas que hacemos a diario y si, por alguna razón, sospechamos que no se siente integrado o que alguien lo ha tratado mal, entonces vamos al colegio y decimos que a nuestro hijo le están haciendo bullying, así alguien se hace cargo y nuestro hijo se sentirá mejor. Lamentablemente, nosotros no podemos hacer mucho desde fuera.
Pero, qué pasa cuando mi hijo es el «bully». ¿Qué pasa cuando mi hijo es el que genera problemas a sus compañeros y trata mal al resto? Ahí el tema se vive del otro lado, casi igual de dramáticamente que del otro, pero invisible, porque parece que nadie se da cuenta que quién «molesta» decide hacerlo porque se siente mal y no lo está pasando bien.
¿Qué hacer cuando es nuestro hijo el que molesta a los compañeros?
Primero que todo, observarlo. Seguramente ha manifestado cambios o dificultades en otras áreas de su vida y no nos hemos percatado. De esta manera es probable que lleguemos a la raíz del problema. Luego debemos tratar de comprenderlo, tratarlo con cariño y respeto para plantearle lo que está pasando, y pedirle que repare su error.
Debemos sugerir siempre, para evitar que esta conducta se repita o que estemos dejando de ver aspectos importantes, consultar con un especialista. Un sicólogo que pueda orientarnos y ayudar a nuestro hijo.
Es fundamental también mantener la comunicación con el colegio; pedir reportes a la profesora nos permitirá tener claros los avances y retrocesos.
Para intentar ayudar a nuestros niños, cuando son ellos los que molestan a sus compañeros, debemos recordar que es muy importante no juzgarlos: una comunicación franca y cercana será muy útil, más que una conversación llena de reproches o castigos, ya que estos últimos generan rabia y puede generar el efecto contrario, que se descargue con los demás al no poder hacerlo con nosotros. Es importante acompañar emocionalmente a los niños, interesarse por sus temas y estar disponibles para compartir con ellos a la hora que lleguemos a casa. Debemos tomarnos el tiempo para hacerlo, ellos nos necesitan.
Muchas veces los niños que molestan a los compañeros lo hacen para evitar ser molestados, para llamar la atención de los demás, para descargar frustraciones que tiene en casa o tiene características personales que lo hacen menos tolerante. Por esta razón debemos actuar en casa, no podemos echar la culpa al colegio de un problema que, si bien aparece en el establecimiento educacional, no se origina en él sino en casa.
Varinia Signorelli
Psicóloga infanto juvenil
Directora www.terapiainfantil.net
Columna publicada en “Mujer Publimetro” www.mujerpublimetro.cl
Escrito por: Prensa-UNAB