Un desayuno inteligente y saludable

La primera comida del día es vital para proporcionar energía a nuestro cuerpo. Pero ¿qué se debe consumir? ¿Cuáles son los alimentos que se tienen que descartar? Fanny Flores, académica de la Escuela de Nutrición y Dietética de la U. Andrés Bello, detalla una serie de recomendaciones.

Cuando dormimos estamos varias horas en ayuno, periodo en el cual no consumimos alimentos, por lo que el organismo utiliza las reservas de glucosa almacenadas en el hígado. Como su palabra lo dice, el des-ayuno,  es importante para romper el lapso sin alimentación y proporcionarle energía al cuerpo para que éste comience a realizar sus labores de la manera más eficiente.

“Acostumbrados a sólo tomar té, café o leche durante las mañanas, muchas personas desconocen los problemas que puede generar el no desayunar adecuadamente, en especial porque esta comida es la más importante del día”, destaca Fanny Flores.

Mejor rendimiento

Según la nutricionista luego de ocho horas de descanso las personas requieren energía para iniciar sus actividades diarias. Esto favorece una mayor capacidad de atención, el aumento de la concentración y atención tanto en clases como en el trabajo, mejorando, a su vez,  el rendimiento.

Diversos estudios han revelado que los factores que ayudan a explicar por qué las personas se saltan la primera comida de la mañana, es la falta de tiempo. De hecho, entre lunes y viernes muchos dedican entre 5 y 10 minutos al desayuno, mientras que durante el fin de semana un mayor número destina casi media hora. 

Yogurt, cereales y leche

Un desayuno equilibrado debiera proporcionarnos un 25% aproximadamente de las calorías totales necesarias del día, asegura la nutricionista Fanny Flores. Este debe incluir lácteos ya sea en forma de leche, yogurt o quesillo; cereales con alto contenido de fibra y frutas, porque mejoran el hábito y tránsito intestinal. La experta también recomienda consumir galletas integrales de avena con almendras, nueces y pasas.

Según la profesional, en una dieta de 1500 calorías (por ejemplo para una mujer de talla media), debiéramos consumir 375 calorías al desayuno. Un desayuno con este aporte calórico sería: un vaso de leche descremada, dos rebanadas de pan integral, una fruta y tres rebanadas de quesillo. 

Un desayuno considerado no saludable, en tanto, está compuesto por café o té, pan con mantequilla, margarina, paté, manjar y quesos amarillos. Este tipo de alimentos sólo ayudan a elevan el peso corporal. Tampoco son saludables los “snacks” de media mañana como papas fritas, completos, helados, hamburguesas, bebidas carbonatadas (gaseosas).