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Post-terremoto: Qué hacer cuando faltan los alimentos y el agua

Con la escasez de alimentos y de agua tras el terremoto donde ciudades del centro sur del país se vieron gravemente afectadas, es necesario conocer qué podemos hacer para sobrellevar esta situación.   ¿Cuántos días se puede resistir sin alimentos ni agua? ¿Cómo dosificar la poca provisión con la que se cuenta? ¿Qué alimentos se […]

Con la escasez de alimentos y de agua tras el terremoto donde ciudades del centro sur del país se vieron gravemente afectadas, es necesario conocer qué podemos hacer para sobrellevar esta situación.

 

¿Cuántos días se puede resistir sin alimentos ni agua? ¿Cómo dosificar la poca provisión con la que se cuenta? ¿Qué alimentos se debe tener siempre en los hogares para enfrentar una posible crisis? Son algunas de las inquietudes que devela Mónica Campano, académica de la Escuela de Nutrición y Dietética de la U. Andrés Bello, para tener presente en estos momentos.

“En condiciones extremas, en promedio, un ser humano podría resistir sin alimento ni agua por lo menos dos semanas, en un ambiente con oxigeno. Dependerá de la edad, de su capacidad hídrica la cual los niños y jóvenes poseen más que los adultos mayores”, explica Mónica Campano, académica de la Escuela de Nutrición y Dietética de la U. Andrés Bello.

“Un hombre resiste más que una mujer porque tiene más masa muscular, la cual concentra más líquido, en cambio, las mujeres tienen más grasa y menos agua en el organismo. En este caso, un deportista resistiría más que un sedentario”, agrega.

 

Agua

Sin duda que uno de los elementos más importantes es el agua. Ante la escasez de ella, la nutricionista advierte que “la dosificación de agua sería 150 ml al día como un mínimo extremo al no tener la posibilidad de conseguir más líquido por el lugar en donde esté y la dificultad para encontrar éste necesario elemento. Por ejemplo, al tener medio litro, éste debe fraccionarse al máximo ya que se les entrega sin saber en cuantos días más se les va a proporcionar otra cantidad puesto que se reparte en esos casos de acuerdo al número de personas también”, dice.

 

Recomendaciones

La académica de la U. Andrés Bello entrega una serie de consejos:

  • Evitar el ejercicio físico: mientras más quieta esté la persona, más ahorra energía y oxígeno.
  • Tratar de tener siempre en los hogares alimentos que estén concentrados en azúcar como chocolates, manjares y otros ricos en proteínas como pescado seco o charquí, además son productos más livianos para transportar. También pueden ser frutos secos como almendras, maní, duraznos y manzanas deshidratas por su contenido en minerales, sustancias  muy importantes en el metabolismo y nutrición de nuestro organismo.
  • Se debe estar pendientes de los síntomas para detectar si la persona está declinando en su condición física: incapacidad de moverse; labios resecos y partidos, demostrando un déficit no sólo de agua sino que también de vitaminas del complejo B; piel en general reseca y disminución máxima de masas corporales tanto músculo esqueléticas como grasas, del pulso y dificultad para respirar; somnolencia, debido al déficit de minerales; y alteración en el metabolismo de la glucosa que se produce en la fase de adaptación del organismo.
  • En casos extremos, si no se cuenta con agua, se puede beber agua de lluvia, si es que se cuenta con ella.

Escrito por: Prensa-UNAB