Repositorio Noticias UNAB

Los dinosaurios del fin del mundo llegan a la UNAB Concepción

¿Sabes qué dinosaurios poblaban Chile? La respuesta estará en la V Conferencia de Cultura Científica el próximo 29 de noviembre.    En el mundo de Spielberg los dinosaurios eran temibles y en el real también lo eran. De hecho dinosaurio significa “lagarto terrible”. Pero aquí en el fin del mundo había dinosaurios que podían ser […]

¿Sabes qué dinosaurios poblaban Chile? La respuesta estará en la V Conferencia de Cultura Científica el próximo 29 de noviembre. 

 

En el mundo de Spielberg los dinosaurios eran temibles y en el real también lo eran. De hecho dinosaurio significa “lagarto terrible”. Pero aquí en el fin del mundo había dinosaurios que podían ser del tamaño de una gallina o de un ñandú y comer sólo vegetales, como el chilesaurus diegosuiarezi, la nueva y extraña especie descubierta hace más de una década en Aysén, por un niño de siete años mientras acompañaba a sus padres, Manuel Suárez y Rita de la Cruz, en una expedición científica.

Por su tamaño y características, este espécimen prehistórico constituye un misterio en la evolución y pone en entredicho la denominación de su especie. ¿Quién podría decir que un ser como éste es un “lagarto terrible”?

Conferencia Científica

Es precisamente el geólogo Manuel Suárez, director de la Carrera de Geología de la UNAB sede Santiago y padre del joven autor del hallazgo, quien presentará la conferencia “El tiempo profundo: geología y dinosaurios en el fin del mundo”, en el marco de la V Conferencia Científica de la Universidad Andrés Bello que, por primera vez,  llega a Concepción.

El Chilesaurus – dice Suárez- estaba acompañado en el paisaje nacional de grandes herbívoros de cuello largo, aunque  sus restos están muy rotos como para conocerlos mejor.Por eso todavía son muchos los misterios que rodean la vida jurásica a nivel local, aunque sí ya conocemos el período durante el que el amigable lagarto vivió en nuestras tierras.

La edad del chilesaurus

Suárez explica que hace más de 200 años, en un rincón de la costa de Escocia, James Hutton, el padre de la geología, demostró que la Tierra era muchísimo más antigua que lo que se creía a la fecha y para ello solamente utilizó la observación y un gran sentido común. “Desde ese momento, los geólogos han seguido investigando y ya en el siglo 20, utilizando métodos radiométricos, determinaron que la edad de nuestro planeta es de 4.500 millones de años y, a la vez, se pudo dar edades en millones de años al tiempo geológico”.

Esto fue clave para conocer que tan antiguos eran los restos hallados en Aysén, ya que fue, precisamente,  utilizando esta metodología que se pudo saber la edad del chilesaurus diegosuarezi: 145 millones de años.

Datos como estos, que permitirán configurar cómo fue la vida jurásica en el fin del mundo, serán los que entregará la conferencia de Suárez, prevista para el 29 de noviembre a las 12.00.

Las inscripciones se pueden realizar a través del sitio https://welcu.com/unab/v-conferencia-internacional-de-cultura-cientifica-concepcion

Escrito por: Tania Merino