Las fórmulas para la reconstrucción
De dónde se sacarán los recursos para la reconstrucción es la principal pregunta que se realizan por estos días los expertos. Se baraja la posibilidad de subir los impuestos, de recurrir a financiamiento externo de bajo y hasta de modificar el royalty de la minería. Algunos datos al respecto nos aporta Sebastián Mathews, académico de […]
De dónde se sacarán los recursos para la reconstrucción es la principal pregunta que se realizan por estos días los expertos. Se baraja la posibilidad de subir los impuestos, de recurrir a financiamiento externo de bajo y hasta de modificar el royalty de la minería. Algunos datos al respecto nos aporta Sebastián Mathews, académico de Ingeniería Comercial de la Facultad de Economía y Negocios de la U. Andrés Bello.
Diversos cálculos han aparecido en los últimos días respecto a los costos del terremoto que afectó a la zona centro-sur del país el pasado 27 de febrero. Mientras el gobierno cifró la recuperación en 30 mil millones de dólares, algunas estimaciones privadas han puesto en tela de juicio esa proyección y la han situado, incluso, en menos de 10 mil millones de la divisa.
Pero, sea cual sea el cálculo, lo cierto es que hay que recurrir a fondos para asegurar la reconstrucción y las alternativas de financiamiento son varias. El aumento del royalty a la gran minería y el alza de hasta un punto porcentual del IVA son algunas de las opciones que se manejan para reconstruir el país.
A juicio del Director de Desarrolllo y Planificación de la Facultad de Economía y Negocios de la U. Andrés Bello, Sebastián Mathews, el Poder Ejecutivo debería optar por proteger los bolsillos de las personas, sobre todo de la clase media y preferir reconstruir las zonas afectadas con los ahorros que se acumularon gracias al boom del cobre (recursos que ascienden a US$15 mil millones, aproximadamente) y a eso sumarle endeudamiento a nivel internacional, puesto que el país tiene una buena reputación en el exterior, lo que le permitiría solicitar préstamos a una tasa de interés baja.
De paso, el economista se muestra contrario a modificar el royalty de la minería. “Creo que una parte debería hacerse con ahorro y la otra con endeudamiento, pero no subir los impuestos a las personas, ningún tipo de impuesto. Se ha hablado mucho de elevar el royalty, pero si hay contratos firmados por unos buenos años, no hay nada que hacer, porque eso pone en riesgo la calificación internacional del país. Hay que cumplir los contratos”, plantea Mathews.
Agrega que “Chile está muy poco endeudado y si se endeuda se puede hacer a tasas bastante competitivas. No veo la razón de por qué no endeudarse y cargarle la mano a las personas y que ellas financien la reconstrucción. El Estado va a tener que gasta cerca de 11 mil o 12 mil millones de dólares y eso es financiable. Tenemos ahorrados en fondos del cobre más o menos 15 mil millones de dólares y si no se quiere gastar toda la plata hay que buscar una forma de endeudarse, pero hay formas mucho mejores que los impuestos”.
Finalmente, plantea que una discusión que debe darse en el país es la de gravar de manera distinta a las empresas por su tamaño. «No hay un impuesto que si se sube hoy sea exclusivo para las empresas grandes. Sólo hay diferencia en la nomenclatura de pymes, grandes empresas, pero no la hay para la carga tributaria. Tiene que empezar una discusión más de fondo. Sería bueno tener políticas diferenciadas para las grandes empresas y para las pymes porque hoy corren bajo las mismas reglas», advierte Mathews.
Patricio Ojeda González
pojeda@unab.cl
Escrito por: Prensa-UNAB