En marzo comenzó el proyecto “Aprende, Ríe y Juega”, desarrollado por Sofía Castro, María de los Ángeles Fierro, Constanza Gajardo, Daniela Páez y Rosario Pinochet, estudiantes de la Escuela de Terapia Ocupacional de la Universidad Andrés Bello.
El objetivo de este proyecto fue fomentar el ocio y el tiempo libre en niños de 5 a 8 años con síndrome de Down, mediante la realización de juegos y actividades para mejorar sus habilidades físicas, motoras, sociales y emocionales.
“El proyecto, realizado en conjunto con la fundación Down Arcoíris de Santiago, nació debido al contexto de la pandemia, que ha generado cambios en la vida diaria de los niños y niñas de la institución, ya que pasan mucho de su tiempo en actividades obligatorias (escolares y terapéuticas)”, explicaron las autoras de la iniciativa.
Las futuras terapeutas ocupacionales argumentaron que “este taller permitió que los niños y niñas puedan participar de manera telemática de las diversas actividades creadas, las cuales abarcan temáticas como medioambiente, arte, cuentos, baile y expresión corporal y cocina. Además, los apoderados pudieron participar de un taller de integración sensorial con el fin de otorgarles herramientas para afrontar de mejor manera el día a día con sus hijos en las áreas sensoriales”.
Finalmente, las estudiantes y coordinadoras del proyecto se mostraron satisfechas con los resultados obtenidos en el taller. “Realmente fue una experiencia muy enriquecedora, pudimos notar cómo los niños y niñas iban cada día más motivados a participar. Sabemos que estas actividades recreativas estimulan su sistema sensorial y habilidades motoras y sociales que son claves para el desarrollo, sobre todo en este contexto sanitario”.