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Estudiante de Fonoaudiología UNAB brilla como bailarina del BAFOCHI

Natalia Villarroel es estudiante de segundo año de la Escuela de Fonoaudiología de la U. Andrés Bello y se destaca en el baile.

Natalia Villarroel es estudiante de segundo año de la Escuela de Fonoaudiología de la U. Andrés Bello y se destaca en el baile. A los 5 años comenzó en la danza y hoy es parte del BAFOCHI, lo que la ha llevado a recorrer Chile, participar en el Festival de Viña del Mar y en la Teletón. Esta es su historia.

 

¿Se puede rendir en la universidad y disfrutar paralelamente el gusto por otra actividad? Se puede, cuesta, pero se puede. Así lo asegura Natalia Villarroel, quien complementa sus estudios de segundo año en la Ballet Folclórico de Chile (BAFOCHI), elenco con larga tradición en nuestro país.

“Comencé a los cinco años acá en Viña del Mar. Ahora soy parte del elenco residente que se encarga de hacer las presentaciones a los largo de todo Chile, también he participado en el Festival de Viña, en la Teletón”, comenta la joven, quien conversó con UNAB Noticias y reveló algunos pasajes de sus dos pasiones: la fonoaudiología y el baile.

-¿En qué momento ingresaste al baile y por qué? ¿Qué te motivo?
Recuerdo que desde niña siempre me gusto bailar, mi mamá fue mi motivación y la que me ha apoyado hasta hoy. Comencé a los cinco años y desde ese entonces nunca deje de bailar.

-¿Cómo llegaste al BAFOCHI?
Ingresé a los cinco años en la academia en Viña del Mar (ciudad donde nació). Un día en una actividad de mi colegio conocí a una niña que pertenecía al BAFOCHI, me interesó e ingresé un día de prueba y me quedó gustando. Luego, a los quince años, decidí postular al Elenco Juvenil en Santiago y quedé. Pasó un año y me escogieron para estar en el Elenco Residente, el cual se preocupa de las actividades a nivel nacional. Y es a este último que pertenezco actualmente.

-¿Qué música te gusta? ¿Cuál es el estilo que prefieres bailar?
No tengo un gusto en particular. Me gusta todo lo que pueda bailar o me haga sentir con la libertad de poder hacerlo. Y obviamente como pertenezco a un ballet folclórico me debe gustar la música folclórica, pero sobre todo la polinésica, de Isla de Pascua.

-¿Cuáles son los hitos que destacas como bailarina y por qué?
He bailado en distintos escenarios, los más grandes han sido el Festival de Viña del Mar, el 2008 y 2010. También en la Teletón desde el 2011, ya sea en el cierre en el Estadio Nacional o en el mismo Teatro Teletón. Ambas grandes oportunidades han sido por selección, donde me sentí muy orgullosa. En el 2015 me escogieron para participar en el vídeo de la Copa América que hizo Noche de Brujas. Y hace unos meses, en la última presentación hecha en escuela militar con los niños cantores de Viena.

-¿Cómo es compatibilizar el baile con el estudio de Fonoaudiología?
En lo personal, al principio cuando comencé con la carrera no se me hizo difícil con mis tiempos, todo calzaba bien porque debía viajar lunes, miércoles y viernes a Santiago y los horarios no me complicaban. Pero ya en segundo semestre y cursando mi tercer semestre se volvió un poco más complicado porque hay más asignaturas y menos tiempo. Entonces, uno debe ser más responsable y comenzar a organizarse muy bien con sus tiempos. También cuando es necesario hablar con los profesores, pedirle a tus compañeros ayuda cuando faltas a clases, entre otras cosas.

-¿Se puede compatibilizar los estudios con otra actividad?
Claramente. Si uno se organiza con sus tiempos es posible poder estudiar y realizar una actividad fuera de los estudios.

-¿Cuáles son tus expectativas a futuro tanto como Fonoaudióloga como bailarina?
Egresar como fonoaudióloga y seguir perfeccionarme en la danza. Siempre desde chica me ha gustado ayudar a los niños, puedo decir que tengo vocación y, por otro lado, siempre me ha gustado la danza. Lo que quiero más adelante es poner mi escuela de danza y seguir desempeñándome como fonoaudióloga.

-¿Cómo te ha apoyado la UNAB en tu desarrollo como bailarina del BAFOCHI?
La UNAB me ha brindado la ayuda para poder faltar a clases en el caso que lo necesite por alguna presentación o faltando a alguna prueba por el mismo motivo, justificándome la Facultad. También me ha dado el espacio para poder presentar mi arte como fue el caso del año pasado en el día del Fonoaudiólogo.

Escrito por: Grupo Alba