UNAB, IOWA y Dirección Meteorológica firman convenio para trabajar en nuevo modelo de contaminación
Se trata de la marcha blanca de una herramienta predictiva que permitiría, en un futuro, adelantar hasta en tres días el pronóstico de episodios críticos en Santiago. El trabajo conjunto incluye transferencia tecnológica, recepción del modelo y capacitación en la operación y mejora del sistema. Hace décadas que nuestra capital sufre de episodios críticos de […]
Se trata de la marcha blanca de una herramienta predictiva que permitiría, en un futuro, adelantar hasta en tres días el pronóstico de episodios críticos en Santiago. El trabajo conjunto incluye transferencia tecnológica, recepción del modelo y capacitación en la operación y mejora del sistema.
Hace décadas que nuestra capital sufre de episodios críticos de contaminación. Las condiciones de ventilación de esta cuenca no ayudan, tampoco el aumento sostenido que ha experimentado el parque automotriz. Por eso, todos los esfuerzos para conocer cómo se comporta las fuentes contaminantes y las herramientas que permitan saber cuándo aplicar medidas de emergencia para mitigar la contaminación o detectar con anticipación estos episodios críticos, son bienvenidos.
Para crear un modelo eficiente de pronóstico meteorológico y de contaminación son necesarios muchos factores. Un equipo multidisciplinario de expertos nacionales e internacionales, tecnología de punta y una entidad dispuesta a trabajar con el nuevo sistema. Todos estos factores se conjugan en modelo de pronósticos WRF-IOWA, desarrollado por expertos de la Universidades IOWA, U. de Andrés Bello y U. de Chile. La entidad encargada de probar el modelo, será La Dirección Meteorológica de Chile (DMC).
Marcelo Mena, Director del Centro de Sustentabilidad UNAB y parte del proyecto, cuenta que se trata de un modelo meteorológico, acoplado con un modelo de trasporte de contaminante, desarrollado originalmente por NOAA. El nuevo sistema contó con la participación del destacado experto mundial en pronósticos de aire, Gregory Carmichael de la Universidad de IOWA, y fue desarrollado por un equipo liderado por el ingeniero mecánico de la Universidad de Chile e investigador Center for Global and Regional Environmental Research de de la U. de IOWA, Pablo Saide.
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Escrito por: Prensa-UNAB