Profesor de Ecoturismo lidera expedición a Nevado Piuquenes y prepara ascenso al volcán Chimborazo
Juan Carlos Delgadillo, académico de Ecoturismo de la U. Andrés Bello y miembro del Club Andino Wechupún, lideró la subida al cerro chileno de más de 6 mil metros de altitud y anticipa que en junio esperan abordar el macizo que “vigila” la ciudad ecuatoriana de Guayaquil. Aquí cuenta detalles de la travesía y anticipa […]
Juan Carlos Delgadillo, académico de Ecoturismo de la U. Andrés Bello y miembro del Club Andino Wechupún, lideró la subida al cerro chileno de más de 6 mil metros de altitud y anticipa que en junio esperan abordar el macizo que “vigila” la ciudad ecuatoriana de Guayaquil. Aquí cuenta detalles de la travesía y anticipa el próximo desafío fuera del país.
Pese a los -21 grados, a la sensación térmica que llegaba a los -35, gracias a vientos de más de 50 km/h los objetivos se cumplieron. Y en un día menos de lo esperado. La expedición del Club Andino Wechupún, liderada por el académico de Ecoturismo de la U. Andrés Bello, Juan Carlos Delgadillo, alcanzó los 6.019 mts. del Cerro Nevado Piuquenes, ubicado en el corazón de Los Andes Centrales, hacia el este de Santiago y justo en la frontera con Argentina, donde se le conoce como Mesón de San Juan.
La expedición comenzó el 14 de enero y “todo resultó bajo el itinerario, pudimos lograr los 3 objetivos: subir el Cerro Pirámides, acceder al Glaciar Tronos y llegar al Piuquenes”, cuenta Delgadillo, que tiene el ambicioso plan de convertirse en el primer chileno en subir todos los cerros nacionales de más de 6.000 metros, que suman más de 38. Ya lleva más de 20.
Delgadillo cuenta que el equipo llegó a la cumbre del Piuquenes el 19 de enero y en todo momento “estuvo muy afiatado, muy bien entrenado, de hecho pudimos bajar un día antes de lo previsto. Cerca de las 12 y media del día llegamos a la cima y el último en llegar lo hizo casi una hora después. Había mucho viento y la sensación térmica era de menos 35 grados, pero nos cobijamos y ahí estuvimos cerca de dos horas”, relata.
El itinerario comenzó el 14 de enero con una caminata de dos días guiada por el arriero Claudio López.
Cruzaron el Estero de Chacayar rumbo a Baños Azules. Desde allí pasaron el Río Museo hasta una zona llamada Las Vegas de San Sebastián para instalar su campamento de altura a 5.200 mts, aproximadamente, en Las Morrenas. De allí lo que restaba era llegar a la cima.
A estas alturas de su carrera, Delgadillo, quien también es guía e instructor de Montaña Escuela Nacional de Montaña (ENAM), dice que los ascensos suelen parecerse, “uno ya casi no distingue las diferencias”, reconoce. Lo que siempre es impresionante y singular es la vista panorámica a más de 6 mil metros de altitud. Desde el Nevado Piuquenes pudieron ver el Cerro Aconcagua, el Tupungato, la cordillera argentina, hacia el sur el Cerro Marmolejo, el Volcán Maipo, el embalse del yeso. Y muy cerca de las nubes.
Lo que viene: 6.267 metros
Otra máxima que ha aprendido el académico UNAB en sus años en cumbres es que el montañista siempre tiene un nuevo desafío por delante. En este caso son tres.
En junio de 2011 realizará la ascensión del volcán Chimborazo, de 6.267 mts., que está ubicado a 150 km al sudoeste de Quito y que parece un enorme vigía de la ciudad de Guayaquil. Imponente, el Chimborazo tiene la particularidad de ser la montaña más alejada del centro de la Tierra y el tercer volcán más grande del mundo. Durante el viaje a Ecuador Delgadillo junto a un equipo subirán además el volcán Cotopaxi, de 5.897 mts. En lo inmediato, en febrero realizarán una expedición a Los Ojos del Salado.
En su faceta académica Delgadillo cuenta que “es importante la experiencia porque se la transmites a los alumnos, le enseñas a moverse en la montaña, a tener la calma, paciencia. Porque arriba el trabajo es muy detallista, paso a paso”.
Escrito por: Prensa-UNAB