Bienal de arquitectura 2010 aborda la reconstrucción tras el terremoto
El Profesor de taller de Arquitectura de la Universidad Andrés Bello, Emilio Marín, será el encargado del montaje de la versión número 17 de este encuentro organizado por el Colegio de Arquitectos que convoca a diversas instituciones de la Educación Superior. Lo imperceptible se podrá percibir. Lo incongruente tendrá sustento racional, la tragedia se convertirá en […]
El Profesor de taller de Arquitectura de la Universidad Andrés Bello, Emilio Marín, será el encargado del montaje de la versión número 17 de este encuentro organizado por el Colegio de Arquitectos que convoca a diversas instituciones de la Educación Superior.
Lo imperceptible se podrá percibir. Lo incongruente tendrá sustento racional, la tragedia se convertirá en solidaridad intelectual. Éstas son las premisas de la Bienal de Arquitectura, que este año se llama “8.8 Reconstrucción Bicentenario 2010”, y que modificó su montaje original debido al terremoto y posterior tsunami que afectó la zona centro-sur de nuestro país el 27 de febrero pasado.
Junto con la muestra nacional y la presencia de importantes invitados del extranjero, en la Bienal 2010 también destaca el trabajo que los estudiantes de las facultades de arquitectura crearon para reconstruir las zonas más dañadas por el cataclismo y que será abordado en el encuentro nacional. “La arquitectura y el diseño no podía quedar ajeno a ésta tragedia y por eso se cambiaron los planes originales en el montaje de este evento arquitectónico”, cuenta Emilio Marín arquitecto y académico de la U. Andrés Bello, quien está a cargo de la puesta en escena del evento .
Este año la muestra incluye un concurso de modelos de emergencia, donde se elegirá al diseño más innovador y útil para entregar soluciones a la gente ante desastres naturales. El Museo histórico Militar fue el lugar elegido para realizar la muestra, que por cierto, no quedó libre de daños tras el terremoto, por lo que se debieron acondicionar los dos patios interiores para recibir a los visitantes.
Cambio de planes
Emilio Marín tuvo la misión de reformular la idea inicial y hacerla moralmente acorde a la situación que marcó al país. “Ante la tragedia la idea es ocupar materiales sencillos y traducir la simplicidad en un montaje poco ostentoso, que dé una lectura acorde a lo que el país sufrió con el terremoto”, cuenta el profesor.
El arquitecto señala que este año el diseño va a estar neutralizado por la sencillez, pero adelanta innovaciones en el montaje y especialmente en la información que variará en su entrega al estar sólo en formato comercial y desplegada en láminas. “En esta oportunidad lo que más importa es la información relegando a un segundo plano al diseño”, explica Marín.
Pero lo más innovador tiene que ver con el audio. “Existirá un sector que hará perceptible lo imperceptible”, asegura el arquitecto. Esto se refiere a instalaciones sonoras realizadas por dos artistas: Nicolás Rupcich y Montaña Extendida. “Ellos mostrarán a la gente una frecuencia de sonidos que no se escuchan habitualmente. La idea es llenar el espacio con ese eco que someterá al público a la fuerza de la naturaleza que no tiene control” agrega el académico de la UNAB. El fin último será utilizar el sentido de la audición para recordar, y no el de la vista, como usualmente ocurre en este tipo de montajes.
Valentina del Campo
vdelcampo@unab.cl
Escrito por: Prensa-UNAB