ORGULLO UNAB: Futura Terapeuta Ocupacional lidera a sus 20 años un circo comunitario
Franchesca Cisterna cursa segundo año en la Escuela de Terapia Ocupacional de la U. Andrés Bello. A sus 20 años, encabeza el proyecto de circo comunitario, que busca poder ser una variante en la vida de la población infanto-juvenil en riesgo social.
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Entre pedazos de telas, acrobacias, colgantes, colores, Franchesca Cisterna comienza a trazar su camino profesional muy ligado a la temática social. A sus 20 años y cursando segundo año en la Escuela de Terapia Ocupacional en la U. Andrés Bello, esta joven ha sabido manejar la disciplina circense como instrumento de intervención comunitaria en beneficio de sectores en situación de vulnerabilidad.
rel=»attachment wp-att-234387″>Alegre, soñadora y comprometida, Franchesca relata cómo conformó “Circo de las Ratas”, una colectividad múltiple, diversa, que tiene como fin buscar la protección de la niñez y juventud frente a factores de riesgo social. Esta es su historia.
¿Por qué decidiste estudiar Terapia Ocupacional?
Entré a Terapia Ocupacional sabiendo poco y nada sobre la carrera. Me comentaban que es un poco de esto y aquello, un poco social pero también médico. Frente a esta ambigüedad de conceptos, me encontré con una carrera que desarrolla una serie de problemáticas sociales, situándose en la persona y/o comunidad, mirando su contexto y cómo éste influye en su ocupación, pudiendo dar las herramientas necesarias para empoderar y acompañar, sin dejar de lado lo más médico o patológico. Este cruce me dio la seguridad de avanzar, entendiendo que estos nuevos conocimientos y prácticas conformarían un desarrollo integral y crítico desde el cual posicionarse, y de esta forma, poder dar un nombre a las variadas problemáticas sociales.
¿Qué te ha entregado la carrera en tu desarrollo personal?
Dentro de estos dos años, el cruce de distintas culturas y realidades ha sido muy fructífero. Tengo compañeros de otras ciudades, con distintas problemáticas e historias, sumado a materias y docentes que desarrollan un pensamiento crítico, problematizador frente a la cotidianidad, lo consensuado como normal o natural ha generado instancias reflexivas, pudiendo discutir en base a distintas miradas y opiniones. Esto me ha aportado una base sobre la cual posicionarme al momento de hablar y entender una problemática, movimiento o cuestión social, y junto con ello, una autorreflexión sobre lo que hacemos como persona y futuros terapeutas para aportar en alguna forma tangible de cambio, cuestionarse el por qué, cómo, cuándo, dónde, para quién.
rel=»attachment wp-att-234388″>¿Cómo nace la idea de tener tu propio proyecto?
La idea de poder aportar con conocimientos de circo en sectores de vulnerabilidad social era una especie de utopía por diversos factores, lo veía como algo factible pero quizás mucho más lejano. En el verano, un compañero de circo, Erick Delgadillo, me ofrece la oportunidad de sumarme en talleres de tela y trapecio para niños/as y jóvenes, con el fin de poder sacarlos de la calle en vacaciones y darles un lugar seguro, donde pudiesen desenvolverse de forma libre y voluntaria. Poco a poco, esta idea fue tomando forma y fuerza, los chicos/as empezaron a generar un sentido de pertenencia hacia este espacio y nosotros a tomar consciencia de las opciones y oportunidades que esta disciplina puede aportar. En conjunto con esto, se desarrolló un lazo de confianza, amistad y cariño entre los participantes de los talleres, creando un ambiente sano, de escucha, respeto y tolerancia que busca como fin de-construir los estigmas impuestos sobre la vida en población.
¿En qué consiste el proyecto de Circo comunitario?
Circo de las Ratas consiste en una organización sin fines de lucro, ubicada en la comuna de Lo Prado, población Manuel Rodríguez, donde se utiliza la disciplina circense como instrumento de intervención comunitaria por medio de actividades dinámicas, inclusivas y, sobre todo, significativas para los/as asistentes. Este proyecto busca poder ser una variante en la vida de la población infanto-juvenil, posicionándose como un espacio libre de estigmas y de desigualdad, conformando una comunidad donde la persona pueda desenvolverse libre y activamente, y de esta forma, poder llegar a un empoderamiento de ella en la medida que las herramientas para esto sean facilitadas. Este ideal se ve ligado directamente con el que hacer del terapeuta ocupacional, el cual gracias a la ayuda de Rocío Gamboa, Valentina Galaz y Felipe Meléndez (compañeros de carrera que aportaron durante un proceso participativo) y Erick Delgadillo (quien nos facilitó esta oportunidad) pudimos complementar al mundo circense y de esta forma trabajar de forma unida conceptos claves, como lo son barrio, entorno, comunidad, vida cotidiana, ocupación, derechos del niño/a, entre otros, los cuales son abordados bajo dinámicas de juego significativos para los chicos/as. Otorgando una base sobre la cual podemos observar, acompañar, empoderar e inclusive intervenir en diferentes situaciones en donde nuestros niños/as y jóvenes se vean involucrados.
¿Cuáles son tus expectativas para futuro tanto en lo laboral como en lo profesional?
Primeramente, deseo poder sacar la carrera. Quizás siga ligada al circo o en otro proyecto, siento que es muy temprano todo como para poder dar un hecho más tangible, pero de todas formas creo que me inclino mucho más por temáticas sociales.
rel=»attachment wp-att-234389″>¿Qué piensas de la inclusión?
Siento que la inclusión es un derecho básico de la persona, es un deber social poder velar para la accesibilidad de todos/as a una equidad en oportunidades. Si bien se ha trabajado y avanzado en distintas orgánicas que apuntan a una mejora para respaldar una real inclusión de la persona, aún estamos al debe. Hace falta reformular una serie de leyes y estatutos que coartan el accionar libre de los sujetos en sociedad, esto se puede evidenciar desde la carencia en accesos para personas con movilidad reducida, hasta leyes de inclusión laboral en donde los salarios, medios de pago y condiciones laborales. La exclusión social es mayoritariamente vivida por minorías sociales (LGTBI, personas en situación de discapacidad, personas en situación de calle, mujeres, niños/as, personas en riesgo social, tercera edad, entre otros) todos ellos tienen una característica en común, no “cumplen” sistémicamente a una forma de gobierno capitalista neoliberal, entonces, es aquí en donde hago un alcance, ¿es la persona quien tiene “el problema” o es un sistema que excluye?
¿Qué te gusta hacer en tus tiempos libres?
En general, me gusta pasar el tiempo con amistades, disfruto mucho la compañía, la conversación, la sencillez frente a todo. Ir al parque, ver una película, tomar clases de danza, circo, o cualquier cosa que me llame la atención.
¿Cómo te definirías en una frase?
Me resulta difícil poder definirme. Pero tengo una certeza: Vivir en función del amor, con humildad y sencillez, guardando coraje y valentía para denunciar aquello que irrumpe en la vida.
Escrito por: Sonia Tamayo