Cómo enfrentan los recién titulados el mundo laboral
Revisa los aspectos más importantes que deben potenciar los recien egresados para una exitosa incorporación al mundo laboral.
Actualmente, las expectativas de los jóvenes al titularse y las del mundo laboral al verse enfrentados a una realidad muy diferente de la esperada es algo común para muchos jóvenes profesionales, los cuales tienen el gran desafío de encontrar su primer empleo. Y es aquí donde la situación se torna complicada, lo que básicamente responde a que no cuentan con la preparación adecuada para la búsqueda de su trabajo.
Esta etapa, donde los jóvenes intentan integrarse al mercado laboral, es conocida como la crisis del recién titulado, ya que existen diferentes factores que los excluye de los procesos de selección, los que no están asociados en lo absoluto a su calidad como profesionales, la que con el tiempo se ve afectada por este proceso que puede llegar a ser considerablemente perjudicial a través del tiempo:
Altas expectativas:
Lamentablemente, las expectativas de los jóvenes respecto a su primer trabajo son demasiado altas y distan de la realidad. Ya que esperan que éste les otorgue un gran sueldo, beneficios y se acomode a sus exigencias, lo que se aleja de las condiciones del mercado actual. Esto debido principalmente a la falta de apego al realismo en donde simplemente no logran entender y asimilar que ellos al terminar un proceso de estudios y titularse, simplemente están preparados para comenzar otro proceso de aprendizaje laboral profesional.
Mala actitud:
Muchos de los recién egresados, enfrentan con una actitud arrogante los procesos de selección, transmitiendo a los reclutadores que son ellos los que están eligiendo el mejor lugar para comenzar su trayectoria profesional, actitud que se ve reflejada en una falta de interés y compromiso profesional y resultado en nada más que en su eliminación de todo proceso laboral.
Flexibilidad:
Cuando los candidatos recién titulados son poco flexibles, tienen menos opciones de encontrar empleo. Esto básicamente debido a la errónea actitud de “ganar ganar” en donde sus expectativas como profesional están tan altas que esperan que “los trabajos se adapten a ellos” y no viceversa.
Disposición:
Su reciente y bien merecido logro de obtención de título profesional en muchas ocasiones afecta la arrogancia, aumentando de tal forma que su disposición queda prácticamente anulada, lo que se refleja en frases muy comunes como “quiero probar a ver si me gusta el trabajo, sino me voy”.
“Es común estar frente a jóvenes recién titulados y que tienen expectativas de renta muy altas sin siquiera tener una idea de las rentas de mercado y además pocas ganas de comenzar aprendiendo, lo que los convierte en candidatos poco flexibles y con muy baja probabilidad de ser empleados, hasta que llega el momento en donde reflexionan y después de un tiempo no menor se dan cuenta de que así no encontrarán empresa alguna que los incorpore”, asegura Hugo Álvarez, Gerente General de Potencia Laboral.
Entender el mercado laboral es complejo para la mayoría de los jóvenes recién egresados. Existe una alta competencia por conseguir un cargo ofrecido, más aún cuando existen ciertos rubros que se encuentran con sobre oferta de profesionales.
Es por esto, que los jóvenes deben adaptarse y ser flexibles a la hora de buscar empleo, ya que sólo de esta manera podrán tener más oportunidades de ser contratados.
“Joven recién titulado, tu mejor aprendizaje y examen de titulación serán las legítimas ganas de trabajar y desarrollarte como profesional, con una actitud de humildad, profesionalismo y compromiso ante todo.
¡No esperes perder empleos que son para ti durante 6 meses para asimilar esto!”, recomienda Hugo Alvarez, Gerente General Potencia Laboral.
Escrito por: Prensa-UNAB