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Informe sobre Desarrollo Humano: ¿Qué tan bien se siente el chileno?

Este informe se centró en la figura de «The Protester», una figura patente del malestar social.

En el Auditorio Campus Bellavista se analizaron los resultados del Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo Humano (PNUD) sobre el bienestar y malestar subjetivo del individuo y la sociedad.

El Informe sobre Desarrollo Humano en Chile 2012 del Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo Humano (PNUD): “Bienestar subjetivo: El desafío de repensar el desarrollo”, abordó las preguntas: ¿Qué tipo de desarrollo queremos?, y  ¿Qué medios consideramos legítimos para alcanzar ese desarrollo? El documento fue presentado por el Dr. Pablo González, coordinador del Informe en Chile.

“La felicidad y la sensación de malestar son tomadas por este estudio junto con los alcances de estos fenómenos, tanto en la persona como en su relación con la sociedad”, comentó el experto.

Asimismo, González expuso que este informe se centró en la figura de The Protester, una figura patente del malestar social (señalado como personaje del año 2011 en la revista Time).

Este estudio, de casi dos años de investigación, determinó que mundialmente existe una tendencia a mejorar la satisfacción individual y, en cambio, se deteriora el bienestar en relación con la sociedad, reflejado por ejemplo; en la disminución de la confianza con las instituciones.

En el caso chileno, la satifacción varía con respecto a los niveles sociales, pues para los estratos socioeconómicos más altos su interés primordial radica en “tener una vida plena y estar con la familia”, mientras que para los estratos menores es “estar tranquilo” y  en niveles intermedios en “estudiar o viajar”.

En la oportunidad, también participaron el Dr. en Sociología, Esteban Calvo de la U. Diego Portales y el Dr. Juan Carlos Oyanedel, Director del Centro de Estudios Cuantitativos de la U. Andrés Bello. Mientras que el Dr. Daniel Martínez, psiquiatra de la U. Católica,  se encargó de moderar la  actividad.

Escrito por: Prensa-UNAB